El submarino Tramontana de la Armada Española zarpaba el lunes desde Cartagena hacia la costa de Libia con una dotación de sesenta militares que proporcionarán información sobre el tráfico marítimo en la zona. Allí permanecerán en inmersión completa durante al menos dos semanas, con los cuidados sanitarios imprescindibles de un médico y un enfermero, en el espacio más reducido imaginable…
Practican todas las especialidades médicas en el entorno más constreñido y profundo, hasta 300 metros bajo el mar. Un ambiente cerrado, exiguo, con ciertos riesgos y escasa habitabilidad puede hacer mella en el marino más resistente, que al menos se verá afectado por el cansancio de un entorno inestable e incómodo y, muy a menudo, por las náuseas. El comandante enfermero Fulgencio Ros, experto en salud mental, recalca la dificultad para desenvolverse en tanta estrechez, hacinamiento y falta de intimidad.
** Lee este interesante reportaje firmado por Pilar Laguna para DM / 24-Marzo-2011
Deja tu comentario
Debe iniciar sesión para escribir un comentario.