Cada día recibimos más información; por e-mails, por  redes sociales, por teléfonos móviles, además de los medios habituales: prensa, radio y televisión. El acelerón de la tecnología ha provocado que la información nos bombardeé a discreción, en tal medida que puede llegar a afectarnos. La ‘infoxicación’ empeora la capacidad analítica, aumenta la ansiedad y conduce a decisiones erróneas. El psicólogo David Lewis creó el concepto de Síndrome de Fatiga Informativa, en su informe Dying for information?  para la agencia Reuters. La información es libertad, pero en exceso es asfixiante y perjudicial. Date un respiro y lee este interesante artículo que seguro te ayuda a sortear la superficialidad de esta entradilla.

 

** Atentos a todo.. y a nada
     Sergio Fanjul /  El Pais/ 12/05/2011